La historia de Papá Noel
Así ayudó Coca‑Cola a consolidar la imagen afable de Papá Noel que todos adoramos
Si hay un icono de la Navidad, ese es Papá Noel, el entrañable y barbudo personaje que viste de rojo y deja regalos a los niños. En torno al nacimiento y popularización de la figura de Papá Noel, así como al papel que jugó Coca‑Cola en todo ello, circulan algunas leyendas urbanas, pero pocos saben la auténtica historia.
Las primeras apariciones del personaje de Papá Noel las encontramos en ilustraciones de mediados del siglo XIX. Sin embargo, hasta los años 30 del siglo XX la imagen de este orondo personaje variaba constantemente, según el artista o la ocasión en que se dibujase: podía ser desde un pequeño elfo hasta un hombre alto y delgado, con todo tipo de indumentarias, como túnicas o chaquetones de piel. Como detalle, aunque mucha gente cree que Papá Noel viste de rojo para relacionarlo con Coca‑Cola, ya había utilizado en numerosas ocasiones ropajes de ese color.
Los Papá Noel de la publicidad navideña de Coca‑Cola en los años 20 tenían un semblante más serio.
Papá Noel apareció por primera vez en un anuncio de Coca‑Cola en 1920, en una ilustración publicada en The Saturday Evening Post. De aspecto serio, este primer Santa Claus fue creado por el ilustrador Thomas Nast, y durante algunos años Coca‑Cola usó en su publicidad diferentes diseños de este personaje desarrollados por otros ilustradores.
Un personaje a medio camino entre lo simbólico y lo real
La imagen del Papá Noel de Coca‑Cola que todos conocemos es fruto del trabajo del ilustrador Haddon Sundblom entre 1931 y 1964.
Sin embargo, Papá Noel, tal como lo conocemos en la actualidad, nació en 1931 de la mano del dibujante Haddon Sundblom tras recibir el encargo de D'Arcy, la agencia de publicidad de Coca‑Cola. El objetivo era crear un personaje a medio camino entre lo simbólico y lo real, la personificación del espíritu navideño y la felicidad de Coca‑Cola. Para ello, el ilustrador se inspiró en el poema A Visit From St. Nicholas, de Clement Clark Moore.
Basándose en San Nicolás, Sundblom creó un personaje entrañable, cálido y amigable que rápidamente caló entre el público y contribuyó a fijar la imagen definitiva de Papá Noel. Sundblom estuvo dibujando anualmente a Papá Noel para Coca‑Cola hasta 1964, aunque posteriormente se han creado más piezas basadas en su trabajo.
Los anuncios navideños de Coca‑Cola también reflejan la evolución de los juguetes de la época, de muñecos de madera a trenes y helicópteros eléctricos.
Anuncios tan esperados como analizados en detalle
Y si el carácter de Papá Noel estaba basado en un poema, ¿en quién se inspiró físicamente Sundblom? Pues en su amigo Lou Prentiss, un vendedor jubilado que le sirvió de modelo durante los primeros años. Cuando este murió, él mismo se utilizó como modelo.
Como curiosidad, cabe decir que los anuncios tenían tanto éxito que la gente se los conocía al detalle. Un año, Coca‑Cola recibió cartas preguntando qué había sido de la señora Noel; por un descuido, Papá Noel apareció en un anuncio sin su alianza. Otro año se percataron de que su cinturón tenía la hebilla al revés; gajes de pintar y posar a la vez frente al espejo.
La gente estudiaba con detenimiento las imágenes, detectando incluso en una ocasión que el cinturón de Papá Noel estaba al revés, lo que ocurrió porque Sundblom se utilizaba a sí mismo como modelo, fijándose en su reflejo en el espejo.
Ya hace 100 años desde que viera la luz el primer Papá Noel de Coca‑Cola, y desde entonces siempre han ido de la mano en Navidad.
Última actualización: 12/11/2020